30 agosto 2012

NO HAY JOVENES DIFICILES, SINO UNA EDUCACIÓN INADECUADA.


En el libro "Padres brillantes, maestros fascinantes"( Augusto Cury, médico psiquiatra en ejercicio desde 1980)  se nos presentan las tremendas dificultades a las que nos enfrentamos quienes tenemos la bonita tarea de educar, y cómo hoy en día no basta con ser un buen padre o un buen maestro: hay que ser brillante, y fascinante.



En el prefacio se puede leer " Este libro hablará al corazón de los padres y los maestros. Ellos luchan por el mismo sueño - hacer felices, sanos y sabios a sus hijos y alumnos-, pero nunca estuvieron tan perdidos en la ardua tarea de educar....).

Adónde va la juventud?  hay un mundo por descubrir dentro de cada niño y cada joven. Quien no logra descubrirlo es porque está encarcelado en su propio mundo. Un educador excelente no es un ser humano perfecto, sino alguien que tiene serenidad para darse y sensibilidad para aprender.

  •  Siete habitos de los buenos PADRES y de los PADRES brillantes:

  1. Los buenos padres dan regalos, los padres brillantes ofrecen su propio ser.
  2. Los buenos padres nutren el cuerpo, los padres brillantes nutren la personalidad.
  3. Los buenos padres corrigen errores, los padres brillantes enseñan a pensar. 
  4. Los buenos padres conversan, los padres brillantes dialogan como amigos.
  5. Los buenos padres preparan a sus hijos para los aplausos, los padres. brillantes preparan a sus hijos para los fracasos.
  6. Los  buenos padres dan información, los padres brillantes cuentan historias.
  7. Los buenos padres dan oportunidades. los padres brillantes nunca desisten.

  •  Siete habitos de los buenos MAESTROS  y de los MAESTROS  fascinantes: 

  1. Los buenos maestros son elocuentes, los maestros fascinantes conocen el funcionamiento de la mente.
  2. Los buenos maestros poseen metodología, los maestros fascinantes tienen sensibilidad.
  3. Los buenos maestros educan la inteligencia lógica, los maestros fascinantes educan la emoción.
  4. Los buenos maestros utilizan la memoria como almacén de datos, los maestros fascinantes la usan como fundamento del arte de pensar.
  5. Los buenos maestros son elocuentes, los maestros fascinantes conocen el funcionamiento de la mente
  6. Los buenos maestros corrigen comportamientos, los maestros fascinantes resuelven conflictos en el aula.
  7.  Los buenos maestros educan para una profesión, los maestros fascinantes educan para la vida.

Es un buen libro, que no deberíamos dejar de leer todos aquellos a quienes nos preocupe la educación de nuestros hijos o alumnos.